Las Hojas Muertas.

domingo, 25 de julio de 2010

La Niña y El Ruiseñor


Una niña se bañaba

en áurea espuma de amor,

y su pájaro cantor

solo un llanto la enviaba.

Esperaba el ruiseñor

de la amada la alegría

y murió su fantasía

derrotado de dolor.

La rosa mas delicada

con su pico la corto,

y envolviéndola en mis besos

en su puerta la dejo.

Llego la que se bañaba

en áurea espuma de amor,


retozando entre las aguas,

mostrándose sin pudor


y ningún caso le hizo


al pequeño ruiseñor


ignorando aquella rosa


que él, amante le ofreció.


Sumergiéndose en la espuma


de su propio, único amor


a todos los ignoraba


también a aquel ruiseñor …



En las aguas cantarinas

en blanca espuma de amor

con tristeza fue muriendo

el amor del ruiseñor

no lo quiso ver la niña

no concedió la ilusión

la concibió muy contento

desde que la conoció

hoy lo oímos por el huerto

entonando una canción

con tristeza y con lamento

del amor que no se dio

su gorjeo es un sollozo...

! lleva una pena de amor ¡



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